El central sevillista fue sustituido en el descanso del partido frente al Atlético de Madrid, el pasado sábado, en el Riyadh Air Metropolitano, tras resentirse de las molestias musculares que ya le habían hecho abandonar el campo el 18 de octubre, en el encuentro contra el Mallorca, que acabó con derrota sevillista por 1-3.
Matías Almeyda señalaba posteriormente en rueda de prensa que el navarro había sentido una “mini-molestia” y que deberán mimarlo mucho durante esta semana para poder contar con el zaguero en el partido del sábado frente a Osasuna, en el Sánchez-Pizjuán. La idea prevista es que sean las sensaciones que vaya teniendo Azpilicueta las que marquen su presencia en los entrenamientos del Sevilla FC.
El técnico argentino también comentó ante los medios que el ex internacional con la Selección española se ha convertido en una pieza fundamental para este Sevilla FC, es el encargado de llevar la voz cantante sobre el terreno de juego, una auténtica extensión del entrenador sobre el césped. Almeyda añadía que la sustitución del ex del Chelsea trastocó su estrategia de partido frente a los colchoneros.
Lo que no se puede discutir es que el Sevilla FC, con Azpilicueta sobre el verde, es un equipo mucho más sólido. Los de Nervión han encajado más del doble de goles cuando el central navarro no ha estado en el campo. La estadística es clara: con Azpilicueta, 6 goles encajados; sin Azpilicueta, 13. Los datos refrendan, sin lugar a dudas, la mejora del conjunto sevillista con el viejo rockero.
Se antoja, por tanto, esencial que Almeyda pueda contar con el ex del Atlético de Madrid para esta jornada, que les enfrentará a Osasuna este sábado a las 16:15 en Nervión. El central ya realizó dobles sesiones para poder llegar al anterior encuentro, por lo que no cabe duda de que volverá a hacer gala de su compromiso con el equipo para intentar estar disponible. Además, el duelo tiene un componente especial para él, pues el conjunto rojillo fue quien le dio la oportunidad de debutar en la élite. Doble motivación.
